Imagen que muestra la belleza y grandiosidad de las naves mudéjares descubiertas.
En la iglesia parroquial de Villanueva de la Reina (Jaén, España) se ha hecho un descubrimiento muy importante para el conocimiento del estilo arquitectónico conocido como mudéjar. Las estancias, pozo, arcos, pilares, capiteles...descubiertos son de gran valor y belleza. Es evidente que este hallazgo enriquece el patrimonio artístico español.
No obstante, paralelamente a lo anterior, se revela otro fenómeno, éste de carácter sociológico. Todo lo encontrado ha sido consecuencia de una pequeña obra para evitar unas manchas de humedad y, ante la sospecha de una construcción oculta, el prior Alberto Martínez y Luís “Ranica”, seguidos por voluntarios y parados, con aportaciones del Ayuntamiento, cooperativas, empresas, donaciones particulares... han conseguido, después de cuatro meses de cooperación, generosidad y esfuerzo, descubrir todo una joya arquitectónica.
Cuando terminen las obras de restauración, y contemplemos el esplendor de todo lo desvelado, no deberemos confundirnos: la arquitectura mudéjar es grandiosa, pero la verdadera joya de todo este fenómeno es la ilusión, el trabajo, la cooperación…de unas personas que creen en los valores humanos.
Imagen y texto de José Del Moral De la Vega
Enhorabuena a Andalucía y a Villanueva de la Reina, en particular.
ResponderEliminarPepe, ¿existen documentos fotográficos del ante y después del descubrimiento? Podría ser orientativo para otros posibles descubrimientos, que seguro que los hay (cómo las meigas).
Un abrazo
Hola querido José.
ResponderEliminarMe parece grandioso ese descubrimiento en la Iglesia de Villanueva de la Reina, y por supuesto, tu acertada reflexión.
¿Qué sería de este mundo sin ese optimismo y esa fe humana que mueve los corazones de muchos hombres a seguir encontrando la belleza oculta tras lo evidente?
De seguro que el mayor premio al esfuerzo de los habitantes de Villanueva de la Reina es la satisfacción de haber participado en el hallazgo de este tesoro que tanto los enriquece.
Gracias por compartirnos esta noticia José.
Un fuerte abrazo para ti.
Si las hay, amigo Pepe; aunque yo no las tengo, sí sé quien tiene las fotos del estado antiguo. Eran la capilla del baptisterio y dos cuartos trasteros, todas con cielos rasos -tan bonitos- y con paredes bien enlucidas.
ResponderEliminarEfectivamente, Angélica, el catálogo de riquezas arquitectónicas de Andalucía se ha enriquecido, pero el acervo moral del pueblo lo ha hecho mucho más.
Muchas gracias a los dos por vuestra visita.
Jose, discúlpeme por el error con el correo. No sé muy bien qué ha ocurrido, porque mi intención era dejar un comentario en el blog de Eulalia... A veces los ordenadores se vuelven locos.
ResponderEliminarDe todas formas me alegro del error, porque así he podido descubrir su blog.
Muchas gracias por haberme avisado de la confusión.
Un abrazo.
Que bueno este descubrimiento,que sin duda traera consigo algo más de hoistoria...Una iglesia preciosa qque seguiro se vera más linda con los cuidados que el pondran en ella,me encantan las iglesias y todo el arte que ellas llevan ,los detalles ,los recovecos.....
ResponderEliminarMariella
Bello descubrimiento, interesante recobrar arte sacro del pasado, nuestra historia, y bello mirar el hecho el que tú nos aportas, Pepe.
ResponderEliminarEl agradecimiento a estas personas que generosamente trabajan por una causa noble. Seguro que se sienten ya premiados con lo que han realizado, pero qué menos de nuestra parte que reconocer el mérito de su entrega y el de tantos que calladamente nos procuran una vida más llena.
Un abrazo.
Muchas gracias, Beatriz, Mariella y Asun por pasaros por aquí y por vuestras palabras. Prometo traeros más noticias de ese templo y de los descubrimientos que se están haciendo. ¡Ese templo es,además de sagrado, mágico, lleno de misterios! Ya veréis.
ResponderEliminarUn abrazo
Desde mi blog: Reflexiones al desnudo
ResponderEliminarSúspiro por la forma en que expresas tus principios, vistos desde tu óptica colmada de sabiduría.
Besitos amistosos!
Muchas gracias, Lully, por tus elogios.
ResponderEliminarEs una alegría tenerte aquí
Un abrazo