Polisacáridos de los garbanzos protegen contra el cáncer


La salud y longevidad de los españoles se puede relacionar con la gastronomía.

El Instituto de Salud Carlos III acaba de publicar un atlas que recoge la distribución municipal del cáncer en España. Y el responsable del estudio, el doctor López Abente, afirma que las diferencias de distribución de la enfermedad se relacionan con factores ambientales –lo que nos rodea, lo que comemos y bebemos, el lugar en el que trabajamos…–
Es incuestionable que el cáncer es una de las consecuencias de nuestra civilización, y si no podemos sustraernos a ésta, tampoco podemos, o al menos es muy difícil, controlar la enfermedad. -¿Los habitantes de una zona industrial pueden evitar respirar aire contaminado; se puede dejar de comer verduras, aún sabiendo que una gran mayoría de éstas se han abonado en exceso con fertilizantes desencadenantes de la enfermedad…?–
Pero en el arcón donde nuestra civilización guarda el conocimiento suelen encontrarse auténticas joyas del saber que, muchas veces, por no venir del pozo de la ciencia, despreciamos. Y ese muestrario, en el ámbito de la alimentación, es inabarcable.
En el siglo XII, el agrónomo español Abu Zacarías Yahia escribía lo siguiente sobre las excelencias de los garbanzos “Si se pone un cuartillo de garbanzos de noche a la luna, cuando está en creciente, y alzados luego por la mañana, antes de nacer el sol, se tienen después a remojo dos horas en agua dulce, y con la misma se cuecen hasta enternecerse, tienen la virtud de que comidos calientes o fríos alegran al que los comiere, divierten el ánimo, hacen olvidar los cuidados, fortalecen el corazón, y apartan los pensamientos sombríos” Conocimientos empíricos que han sido confirmados por la ciencia –Hoy día sabemos que los garbanzos son muy ricos en betaglucanos, polisacáridos no digeribles que forman un gel con el agua intestinal, gel que no solo impide la absorción de gran parte del colesterol presente en el intestino durante la digestión, sino que tiene un efecto protector contra la diverticulitis, el estreñimiento crónico y el cáncer de colon y recto_.
Desde hace algún tiempo, en España, nuestra sabia cultura gastronómica ha sido sustituida por otra en la que predominan las grasas saturadas. ¿Estarán relacionados el incremento de los cánceres del aparato digestivo, tal y como recoge el estudio del Instituto de Salud Carlos III, con la disminución del consumo de garbanzos?



Las comidas de garbanzos son una pieza fundamental para evitar muchas de las enfermedades del aparato digestivo.

Texto y composición fotográfica de José Del Moral De la Vega


Comentarios

  1. Que interesante Jose! Muy buen artículo... la verdad fue un placer leerte!

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  2. ¿Tú comes garbanzos, Carla? Las chicas que lo hacen conservan un brillo especial en su piel. En serio.
    Un abrazo

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  3. Hola, querido José.

    Coincido con Carla. Lo que nos narras es sumamente interesante. Bueno, quiero decirte que después de leerte, hasta he sentido ganas de comer a diario garbanzos, tan ricos en sabor y en nutrientes.

    Muchas gracias José, por tu siempre especial colaboración al enriquecimiento de la cultura universal.

    Un beso grande.

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  4. Hola! Con motivo del segundo aniversario de nuestro blog, queremos regalarte un presente. Pasa a buscarlo al blog del Taller.

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  5. Como siempre, Angélica, tus comentarios son muy generosos con mis posts -a mi me parecen muy sencillitos-
    Un abrazo

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  6. Sois extraordinarios, Kapasulinos. Enhorabuena por ese aniversario.
    Un abrazo

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